Las expectativas hablaban de un clásico de Avellaneda de alto voltaje. Para Racing, simbolizaba una señal de alarma la posibilidad que Independiente le diera uno de los últimos golpes de gracia para terminar jugando la Promoción, algo que aparecía como un regocijo grande para los Rojos, ya alejados de la lucha por el campeonato. Sin embargo, el 0 a 0 final dejó a los dos en deuda y a cada uno preocupados por sus luchas disímiles. La Academia no logra engrosar su promedio; Independiente puso en riesgo su clasificación a la Copa Sudamericana.
El clásico de Avellaneda mudado a Liniers no fue bueno. Independiente insinuó más, contó con más posibilidades de gol, aunque, en el segundo tiempo, pudo caer si no fuera porque Sava no estuvo certero para concretar dos situaciones inmejorables para que delirara la Academia.
Con el punto, Racing continúa sumergido en la zona de Promoción, a tres puntos de Colón, que jugará mañana ante River y será rival de la Academia en la última fecha. Quedan sólo seis puntos en juego para el equipo de Juan Manuel Llop y el repechaje para seguir en primera división cada vez está más cerca. Rosario Central ya es inalcanzable, o sea que la pelea se plantea directamente con el conjunto santafecino, salvo que Olimpo ratifique su buen momento.
Independiente, que suma tres empates consecutivos, por ahora se está clasificando a la Copa Sudamericana, aunque si mañana Vélez derrota Gimnasia y Esgrima de La Plata, el conjunto de Liniers, que la próxima fecha se medirá con los Rojos, ocupará esa plaza junto a Estudiantes, San Lorenzo y Argentinos juniors.
El público dijo presente en la soleada, pero fría tarde de Liniers. Con las entradas disponibles vendidas, la cancha de Vélez se tiñó de rojo en casi todos los sectores. Los hinchas de la Academia también acompañaron y cubrieron el sector disponible para los visitantes. Mucho color, fervor y pasión se vislumbraban en el clásico de Avellaneda en un escenario distinto.
El primer tiempo no fue bueno. Independiente insinuó más y contó con las mejores situaciones para abrir el marcador. Sin embargo, no por ello jugó mejor. A pesar de que finalmente Montenegro no fue titular, tuvo en Denis al hombre más desequilibrante de la primera mitad, aunque el goleador de la temporada casi no contó con ocasiones claras para desnivelar.
Racing mostró más ganas que fútbol. Con Sava y Navia muy solos arriba, la Academia casi no arribó peligro al área de los Rojos. A los 7, un cabezazo de Guillermo Rodríguez fue neutralizado por Martínez Gullotta. A los 18, un contra conducida por Denis casi termina en gol de Sosa. Independiente llegaba, pero no terminaba de ser claro.
Recién a los 34 contó con la situación más clara para irse en ventaja. Machín escapó por la derecha, tiró el centro y Fredes apareció solo por el segundo palo. El volante dominó el balón, pero se demoró demasiado y Franco Sosa despejó sobre la línea. Un tiro libre ilusionó al público de Racing, aunque ni siquiera así el conjunto visitante arrancaba algún suspiro. Al entretiempo, se fueron con la igualdad sin goles.
En el complemento, entró Montenegro por Machín. Pero el partido transitó por los mismos carriles. Independiente era algo mejor, pero no conseguía la ventaja. A los 9, Racing pateó con peligro por primera vez en el encuentro. Un media vuelta de Sava fue bien contenida por Assmann. Acto seguido, los Rojos pudieron abrir el marcador. Primero lo tuvo Matheu y, luego, tras un centro de Rolfi, Denis cabeceó muy alto.
Racing empezó a preocupar con algunos contraataques. Navia pudo abrir el marcador, a los 13, aunque su remate se fue algo ancho. Diez minutos después, llegó la situación más clara de la tarde. Tras un centro bajo por la derecha, Sava ingresó solo por el medio, pero su definición impactó en el travesaño. Hubo más: a los 26, luego de un envío desde la izquierda de Shaffer, Sava, otra vez solo, cabeceó desviado.
Las preocupaciones empezaban a extenderse en Independiente. Para variar, Montenegro se resintió de su lesión muscular, que no le había permitido ser titular, y, en su lugar, entró Sebastián Carrizo.
Parecía que Racing encaraba mejor el tramo final del partido, aunque las posibilidades y la posesión fue repartida hasta el pitazo final de Héctor Baldassi, que deja a los dos en deuda.